17 abr 2009

beware of the human

Jode reconocerlo, es más: jode muchísimo, pero todos algún día debemos reconocer una decepción. Entregarse totalmente a una persona, dar tu brazo a torcer, negarte a oír rumores, desconfiar de todo el que te diga lo contrario, lo que no quieres ver, para que luego te fallen: jode.

Nos hacemos los duros, lo negamos, "Estoy bién, estoy bién", "No pasa nada, es mejor así", "Nunca he estado tan bién", blablablá blablabá... pero no, en el fondo nos duele, y a veces mucho.
En el fondo sabemos que algo nos ha cambiado, que no nos gusta un número porque te recuerda a una fecha, que hace meses que no comes algo que te encanta y que significaba algo especial, que borras un nombre de esa lista de "nombres-para-mis-futuros-hijos" a pesar de que antes te agradaba, y sobre todo, que todos los recuerdos con esa persona se nublan. Simplemente el momento más fantástico que recuerdas es ahora un momento normal y corriente, tirando a cutre. Su colonia no olía tan bien ni era tan bueno besando. Su pelo no era sedoso ni sus ojos expresivos. Sus palabras te hacen ahora reír, burlarte o enfadarte, pero ya no te parecen ni siquiera bonitas, aunque lo fueran. La luna no brillaba de una forma especial ni las mañanas eran más cortas. Los profesores no eran más amables ni tus padres más cariñosos.
Ni esa persona era perfecta, ni tu mejor.

Solo quedan recuerdos así, borrosos, oscuros, estúpidos o tristes, y eso nos jode.

3 comentarios:

  1. Soy Rafa, supongo que sabes quien soy.
    Pues nada, que me disponia a felicitarte
    por el tuenti hoy, dia de tu cumpleaños
    feliz ydemas, y vi que tenias blog.
    Así que me pase por aquí y he estado leyendo
    tus textos.

    Te agrego a mi blog como amiga o algo así
    Un beso BEKSTREINCH.

    ResponderEliminar